Tomás Nevinson, medio español y medio británico, fue espía al servicio del Reino Unido. Vive retirado en Madrid la ciudad de sus orígenes llevando una vida un tanto anodina de Embajada. La llegada de Tupra, su antiguo jefe en una sección especial no bien definida de los servicios secretos británicos le descoloca. Le trae una orden camuflada en propuesta de vuelta puntual al servicio y apoyada por la presión combinada de halagos y amenazas encubiertas. Se trata de identificar y eliminar entre tres mujeres a una antigua terrorista del IRA y también colabora de ETA o viceversa. Tomás, acuciado también por la posibilidad de salir de su vida plana y sin sentido acepta el encargo. Se traslada a la ciudad del noroeste donde viven las tres. Allí, como profesor de inglés se va relacionando no sin notable dificultad con cada una de ellas. El tiempo se alarga y con la ayuda de su antiguo jefe va creciendo la probabilidad de que una de ellas sea la terrorista buscada, pero sin llegar a la certeza absoluta. Tomás, a pesar de su antigua dureza se ve atenazado por esa duda paralizante. Trama potente. Profundiza y se adentra en los personajes principales entretejiendo con maestría sus relaciones. Tiene intensidad dramática que lleva a seguir leyendo a pesar de alguna bajada de tensión. Está bien escrita: con oficio y buena pluma. Sin embargo, resulta lenta y de lectura a veces difícil por largos incisos y detalladas descripciones. A los diálogos les falta verosimilitud al alargarse, a veces en disquisiciones un tanto digamos que filosóficas, aunque envueltas en una fina esgrima dialéctica. Abusa un poco de las citas que en vez de aclarar entorpecen la comprensión.
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